APRENDER A VIVIR COMO INMIGRANTE por Franco Colmenares

MÁS QUE PENSANDO.......MEDITANDO QUE:

REFLEXIONES DEL DÍA A DÍA.

APRENDER A VIVIR COMO INMIGRANTE………… y no morir en el intento.

Opinión por: Franco Colmenares 

VicVennoticias.-Existen momentos en la vida en que las circunstancias, la situación o algún motivo de fuerza mayor (hasta el amor) te hace tomar decisiones que tal vez nunca pensaste. Específicamente me refiero al caso de la Migración  o Emigración, o en lenguaje coloquial IRTE DE TU PAIS, hacia otros rumbos con o sin familia.

En la mayoría de los casos por más que programemos, planifiquemos o pensemos a futuro, nunca las cosas salen tal y como lo imaginamos, ara algunos es mejor- la minoría, para otros no tan bueno - la mayoría.  Seguro estoy que nadie quiere migrar, nadie piensa- habrá sus excepciones, aquellos que nacen con espíritu aventurero – pero realmente casi nadie tiene en mente dejar su terruño, su patria, su familia, su vida y su historia.

El migrar es una lotería, donde paradójicamente no todo se le puede dejar al azar, pero depende mucho de la suerte y también de quienes te reciben.

Para nosotros los venezolanos, que nunca fuimos migrantes sino receptores de ellos en diversas décadas y por diversas circunstancias, creo que nos ha tocado una muy difícil época para aprender a ser inmigrantes, extranjeros. Las redes se han convertido en medios de apoyo de quienes nos ven con buenos ojos, pero también en el perverso aliado de destrucción de quienes nos adversan y promueven la xenofobia y otros tipos de sentimientos en contra. Hay quienes dicen y pregonan que en mi país se aplicó la misma receta a quienes llegaron en calidad de migrantes, refugiados o desplazados (en el caso de Colombia) en distintos momentos y años. Ante todo quiero aclarar que los venezolanos somos una mezcla de diversas razas y nacionalidades que desde la época de la conquista 1592 en adelante, dejamos de ser originales para crear un ser hibrido compuesto por: Españoles Blancos, Indios, Negros de donde descendieron, mestizos, zambos, pardos y la mezcla de todas estas derivaciones que dieron origen a lo que hoy representamos,  al contrario de muchas naciones que sí lograron mantener en gran parte sus razas originarias como mayoría étnica en sus tierras, por ejemplo Perú, (aunque tiene mucha mezcla con los japoneses) Bolivia, Ecuador, México, Guatemala y otros. En respuesta a esto debo aclarar que si existió en ciertos momentos de gran afluencia migratoria no supervisada o desproporcionada un halo de rechazo hacia algunas personas que lamentablemente llegaron a causar daño a delinquir o a observarse en ellos comportamientos no cónsonos con las normas que existían en el país. Tal es el caso de algunos provenientes de países vecinos como Colombia, algunas islas caribeñas o países del centro de América lo que no implica que fuesen todos los que llegaron pero si algunos.

Recuerdo que en la vía hacia Caricuao, en un cerro, existía una zona donde se leía en la entrada de un barrio o asentamiento de ranchos, PROHIBIDA LA ENTRADA A VENEZOLANOS ZONA y decía el nombre del país, no recuerdo si era Ecuador o Nicaragua. También recuerdo que en Chacaíto existían sitios nocturnos, bares o  clubes donde no se permitía la entrada a los ciudadanos Venezolanos, como en el Pollo Farsante de  origen colombiano o el Club Dominicano, donde todos los fines de semana había algún homicidio o peleas que derivaban en sangre. Mi memoria trae a colación que Petare el barrio más grande de Caracas, yo me atrevería a decir Venezuela, fue en su mayoría conformado por grandes comunidades de diferentes países, como Ecuador, Colombia, Perú, Trinidad, Nicaragua, Jamaica y que con el tiempo se convirtió en un mundo aparte de la Caracas Ciudad, un Submundo donde las leyes no eran importantes y las normas se transgredían al antojo. El estado venezolano, promovió por razones políticas, la proliferación de estos barrios y facilito recursos para las mejoras de viviendas, construyendo escalinatas y ranchos de bloque y madera a diestras y siniestra para la cantidad de personas que llegaban en busca de un mejor destino a consecuencia de las guerras, dictaduras y desplazamientos a los que fueron sometidos en sus países. Allí se formaron familias que aún perduran en 3ra y 4ta generación.

Si me retrotraigo a épocas más lejanas desde los años 30 después de la muerte Gómez y en el mandato de López Contreras luego o en plana guerra civil española, llego la migración Española conformada por Canarios, Catalanes y Vascos (allí llego mi suegro con 20 años de edad, año 36) quienes vinieron como constructores y levantaron lo que hoy es el Silencio y otras zonas de la capital, ayudaron a la electrificación de las ciudades y pueblos, a construir carreteras hacia el interior del país, así como urbanizaciones en las zonas circunvecinas a la capital. Para los 50 la migración Italiana y los 60 la portuguesa, del oriente medio y en menor medida los chinos, todas hoy en día convertidas en grandes forjadores de las industrias, comercios y empresas que son grandes emporios en las diversas ramas que conforman o conformaban la sólida economía del país. Para los 70, chilenos, Argentinos (muy pocos) por razones políticas y colombianos motivados por la guerra interna en su nación y a quienes Carlos Andrés Pérez y otros presidentes a muchos otorgaron la nacionalidad y legalidad.

Dicho esto, que mi memoria, mis vivencias y mis lecturas de la historia y de la prensa (gracias papá por el amor a los libros y a la lectura) me hacen recordar y compartir, en virtud de lo que estamos viviendo en algunos países los millones de venezolanos que nos encontramos caminando por el mundo (literalmente) se me viene a la mente como de forma familiar y hasta de complicidad denominábamos  a cada nacionalidad. A los españoles todos les llamábamos Gallegos, a los Portugueses e Italianos Los Musiu y Ma que diches, a los Libaneses, Sirios o Árabes , marchantes o Arabes a todos, a los Israelitas Los Judíos, a los Colombianos Los Caliches, a los Argentinos los Che y así a todos les colocábamos motes, más por identificarlos que por degradarlos u ofenderlos. 

Todo lo acá comentado está respaldado por la prensa, decretos gubernamentales  y acciones públicas y sociales de la época así como por mis propias vivencias. Hoy nada está oculto al ojo humano así como lo de antes es de dominio público lo que hoy sucede y acontece está en manos del mundo y será historia, nada pasara por debajo de la mesa.

Hay personas que creen que porque uno es solidario, tolerante, comparte, apoya y hasta nos aguantamos insultos, amenazas, callados (a veces, solo a veces) en un país que no es el nuestro, somos ignorantes, no leemos, no nos informamos y no sabemos defender nuestros derechos, la verdad y aún más y no nos asesoramos bien. Lamentablemente hay gente que se equivoca y cree que buscando perjudicar a quienes tuvimos la necesidad de migrar, por xenofobia o por bajezas humanas, nos amedrentan o nos hacen bajar la cabeza. 

A Dios gracias en mi caso particular no tengo rabo de paja, ni historias oscuras en mi vida, no he cometido delito alguno, ni sentencia, con la cual pueda alguien con insuficiencias morales y hasta mentales perjudicarme, igual digo y se de muchos venezolanos que hoy estamos fuera de nuestra patria mas no niego que existen también indeseables y inadaptados a quienes debe caer el peso de la Ley. Al llegar a este país donde hoy resido legalmente y de manera permanente como  lo decreta la Ley, lo primero que hice fue leerme, la Constitución, la Ley de Migración y estoy en el Código Penal y Civil, algo que deberíamos hacer todos primero para informarnos bien,  para evitar ser chantajeados, manipulados o humillados. Lo peor de todo es cuando en muchos casos son tus mismos coterráneos u otros extranjeros también migrantes quienes ejercen la función de verdugos. 

Ya lo dice el dicho, NO HAY PEOR CUÑA QUE LA DEL MISMO PALO. Convidó a todos mis coterráneos que por la razón que sea, hayan migrado, ante todo leerse bien las leyes del país al que fueren y revisar muy buen sus Deberes y sus Derechos y asesorarse con los organismos pertinentes en caso de agresiones, chantajes, calumnias, ACOSOS Y AMENAZAS, si las tienen, presente pruebas, escritas, audios, vídeos o cualquier otra que sirva para defenderse de este tipo de hecho y lograr justicia. Hay instituciones que defienden al migrante y más aún cuando somos CIUDADANOS de bien, sin prontuario delictivo y de conducta intachable. 

EVITEMOS COMETER FALTAS NO LES DEMOS RAZONES, PERO TAMPOCO ACEPTEMOS HUMILLACIONES.

Nota: VicVennoticias no se hace responsable ni solidario de las opiniones emitidas por el autor, que son de su única responsabilidad.