"LA SILLA MACULADA" Opinión por: José Gregorio Mendoza C.

LA SILLA MACULADA

José Gregorio Mendoza C.

Opinión

                     

                   VicVennoticias.-El insólito universo es una expresión que sintetiza una situación que no tiene cabida en el sentido común de los ciudadanos, es una manifestación idiomática que adquiere plena vigencia a raíz de los hechos recientes en la Organización de las Naciones Unidas, en cuanto respecta a los derechos humanos; este circunstancial y eventual hecho ha de ser objeto de variadas interpretaciones por la comunidad internacional y sus organismos en pos de evaluar la objetividad y razón de ser de sus correspondientes instancias.

                     Todos los cuerpos colegiados son instancias deliberantes, de los cuales la credibilidad, el respeto, el valor y la trascendencia de sus actuaciones y decisiones están en función a la representatividad que implícitamente reflejen y tengan los integrantes que forman parte de esos organismos e instancias de análisis, evaluación y estudio; tanto como de la valoración, honestidad y objetividad que puedan dar a los informes y gestiones que suficientemente soportados y fundamentales reciban en cada caso de sus comisionados o las organizaciones no gubernamentales que se ocupan de estos fundamentales derechos de los ciudadanos del mundo, en una sociedad tan globalizada como la presente, en esta época en la cual la tecnología ha transformado al globo donde se han estrecha mediante la informática las distancias físicas que ya resultan en la práctica imperceptibles.

                     El Consejo de Derechos Humanos, creado el 15 de marzo de 2006 en votación de la Asamblea General de las Naciones Unidas con los votos en contra de Estados Unidos de América, Israel, Palaos y las Islas Marshall,  las abstenciones de Bielorrusia, Irán y Venezuela; este consejo, sustituye a la Comisión de Derechos Humanos, instancia  muy cuestionada por  incluir miembros que no respetaban los derechos humanos de sus propios pueblos. Fundamentándose en el principio que: “nadie da de sí, lo que no tiene en sí”.  Tomando en cuenta que su objetivo es la promoción, defensa y respeto de los derechos humanos en el mundo.

Está instancia la integran  47 estados, repartidos por grupos regionales de estados que conforman las naciones unidas, de la siguiente manera: África 13,  Asia 13, América Latina y el Caribe 8,  Europa occidental y otros grupos 7, y Europa Oriental 6; elegidos todos por mayoría simple; originalmente se sustentaba el concepto de dar prioridad para su conformación, a los países que más promuevan el respeto a los derechos humanos. Los miembros de la ONU deben valorar cada  actuación y dar prioridad  a los candidatos para el Consejo, a países que promueven el pleno respeto a los Derechos Humanos; por cuanto algunos de los miembros  del Consejo, entre otros: China, Cuba, México, Arabia Saudita y Venezuela, son considerados como altamente represivos según Amnistía Internacional y otras organizaciones no gubernamentales; se inclinan por un proyecto que tome en cuenta los Índices de democracia, valorado por un consejo de investigadores; como dato anecdótico y no menos cuestionable, el régimen cubano ha ocupado un puesto en este consejo desde 2009 hasta la fecha.

                     La reciente elección del consejo de Derechos Humanos de la ONU, constituye una nueva afrenta a la dignidad, honor y credibilidad tanto de esa instancia en particular como de la ONU misma; merece especial atención y referencia, que el régimen cubano directamente o con sus marionetas sea un integrante permanente de ese cuerpo, a sabiendas de su conducta y acción ante los derechos individuales, la dignidad,  la libertad y la justicia.

                     "Cosas veredes, Sancho, que no crederes"; esa clásica expresión quijotesca bien puede aplicarse a la presente circunstancia, más aún si recordamos que todavía está fresca la tinta, del bien documentado, real y crudo informe que refleja el resultado del trabajo realizado por el equipo designado por la alta comisionada para los derechos humanos en Venezuela; es una raya más para un tigre dirán los voceros del totalitarismo, para seguir ocupando el lugar en esa instancia, que bien puede calificarse como: “la silla maculada ” Octubre 2019

Nota:VicVennoticias no se hace solidario ni responsable por la opinión aquí emitida, la cual es única y exclusiva del autor.