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VicVennoticias.-Desde pequeño en muchos hogares - sobre todo en mi época - se enseñaban algunos valores que hoy en día ya casi ni existen, LA HONESTIDAD, LA VERDAD y LA LEALTAD DE LA AMISTAD.

Las coloco así en mayúsculas porque así era el tamaño de la importancia de esos valores.

Cuando digo HONESTIDAD no me refiero nada más esa que se pregona hoy en día de la que tantos carecen, la de robar o ser corrupto, sino la de la palabra la de los hechos, la que debería ser un principio fundamental de vida, SER HONESTO CONSIGO MISMO primero para poder serlo con los demás. Dicho esto creo que la sociedad se ha convertido en una sociedad de "Hipócritas y Deshonestos Convenientes" Ejemplos: - No le digas a fulano o perencejo la verdad porque no le va a gustar- No digas todo lo que sabes hacer en la entrevista porque seguro no te dan el trabajo-, -Dile una mentira piadosa para que no se sienta mal-, Caramba fuiste muy duro diciéndole la verdad en su cara-. Y así muchas otros ejemplos que solo incentivan la Deshonestidad e hipocresía acompañada de aquella frase sobre el criterio de que NO ES LO QUE SE DICE SINO CÓMO SE DICE.

Sobre la VERDAD o la MENTIRA, algo que deriva precisamente del tema anterior, es el pan nuestro de cada día, la mayoría de la gente vive en una, de una y para una mentira. Se crean expectativas falsas de vida, se inventan currículos para tener acceso a empleos y en casos extremos hasta hechos, situaciones, historias, anécdotas falsas para llegar a niveles o status. Son pocos los que se atreven a decirle a alguien, por más confianza que haya, "NO ESTÁ BIEN, ESTÁ MAL, ESO NO SIRVE, ESTA MAL ESCRITO TIENES MALA ORTOGRAFÍA, REALMENTE NO CANTAS O DEBES ESTUDIAR UN POCO MÁS PORQUE ESTAS DESAFINADO". NOOOO nunca jamás como se te ocurre, hay que apelar a la mentira porque hace sentir bien a los demás que solo quieren escuchar eso, aunque en el fondo y al final sea más perjudicial y dañino que la verdad. CREO que esa puede ser la razón de que estemos rodeados de un universo de profesionales, políticos, abogados, médicos, ingenieros o de cualquier profesión u oficio realmente mediocres.

La situación de Venezuela y de los venezolanos es crítica muy crítica y hay que decir la verdad, el desgobierno juega a la destrucción total y si no los paramos pocos quedaran para contarlo y los que regresaremos no encontraremos nada del país. Cada ciudad es un escenario desolado y propio de una posguerra, todo en ruinas, calles, comercios, industrias, casas, instituciones, etc etc,  ellos juegan a esa destrucción con efecto desmoralizante, pero también a la destrucción psicológica, moral, ciudadana, humana. Hay que decir la verdad, pudiéramos ir mejor pero no vamos tan bien porque para poder saber que hacer hay que saber LA VERDAD.

LA LEALTAD, en el próximo artículo escribiré sobre este valor y condición humana que desde que Judas vendió a Jesús por 30, monedas hoy se ha exacerbado de tal manera que casi no existe. Se puede vender hasta su propia madre por mucho menos.

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